MEDICIÓN DE SO2: DIÓXIDO DE AZUFRE EN ESPACIOS CONFINADOS

INTRODUCCIÓN A LA MEDICIÓN DE SO2

El dióxido de azufre (SO2) es un gas incoloro y altamente irritante que puede representar un riesgo para la salud en entornos laborales si se encuentra en concentraciones elevadas. Las principales fuentes de exposición a SO2 en entornos laborales.

ORÍGENES Y CAUSAS MÁS HABITUALES DE LA EXPOSICIÓN A SO2 EN ENTORNOS LABORALES

Algunas de las fuentes y causas más habituales de exposición a SO2 en entornos laborales incluyen:

• Industria Química: La producción de productos químicos que contienen azufre, así como la fabricación de ácido sulfúrico, puede generar emisiones de SO2.
• Refinerías de Petróleo: Durante el procesamiento de petróleo crudo, se pueden liberar gases que contienen azufre, incluyendo SO2.
• Fundiciones y Metalurgia: La extracción y procesamiento de minerales que contienen azufre, como el mineral de hierro y el cobre, pueden liberar SO2 como subproducto.
• Generación de Energía: Las plantas de energía que queman combustibles fósiles, como carbón y petróleo, pueden liberar SO2 como parte de los gases de combustión.
• Procesos de Desulfuración: En algunas industrias, se utilizan procesos de desulfuración para reducir la cantidad de azufre en los productos químicos o gases producidos. Esto puede generar emisiones de SO2.
• Accidentes y Derrames: En casos de accidentes, como derrames de productos químicos que contienen azufre o fallos en equipos de seguridad, puede producirse una liberación repentina de SO2 en el entorno laboral.
• Soldadura y Corte de Metales: En procesos de soldadura o corte de metales, se pueden liberar gases que contienen azufre, incluido el SO2.

CARACTERÍSTICAS FÍSICO-QUÍMICAS DEL SO2 DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA SEGURIDAD

• Apariencia y Olor: El SO2 es un gas incoloro, pero tiene un olor penetrante y desagradable que se describe a menudo como similar al olor a huevo podrido.
• Densidad: El SO2 es más pesado que el aire, lo que significa que tiende a quedarse en niveles bajos en espacios cerrados y mal ventilados. El SO2 tiene un densidad relativa de 2,25 siendo la del aire 1.
• Solubilidad en Agua: El SO2 es altamente soluble en agua, lo que significa que puede formar ácido sulfuroso cuando se disuelve en agua. Esto puede llevar a la formación de ácido sulfúrico en presencia de oxígeno y humedad.
• Toxicidad: El SO2 es tóxico y puede causar irritación en los ojos, nariz y garganta incluso a concentraciones relativamente bajas. A concentraciones más altas, puede provocar dificultades respiratorias y daño pulmonar. La exposición prolongada o en concentraciones muy elevadas puede ser mortal.
• Inflamabilidad: El SO2 en sí mismo no es inflamable, pero puede reaccionar con otras sustancias químicas para formar compuestos inflamables o explosivos. Por lo tanto, se deben evitar mezclas con sustancias reactivas.

RIESGOS DERIVADOS DE LA PRESENCIA DE SO2 EN ESPACIOS CONFINADOS

NO INFLAMABLE

TOXICIDAD – Como hemos mencionado el SO2 es un gas extremadamente toxico. El INSHT publica anualmente el listado de compuesto potencialmente dañinos y los valores máximos permitidos de estos compuestos.

Para el SO2 disponemos de 2 valores límite de exposición:

VLA-ED (valor limite de exposición ambiental de exposición diaria) – Sería la cantidad máxima permitida de SO2 que podemos inhalar durante una jornada de 8 horas.

VLA-EC  (valor limite de exposición ambiental de exposición corta) – Sería la cantidad máxima permitida de SO2 que podemos inhalar durante un período de 15 min.

EFECTOS DEL SO2 EN EL ORGANISMO

• Irritación de las Vías Respiratorias: La exposición a concentraciones elevadas de SO2 puede irritar las vías respiratorias superiores e inferiores. Esto puede llevar a síntomas como tos, irritación de la garganta, dificultad para respirar y opresión en el pecho.
• Agravamiento de Enfermedades Respiratorias Crónicas: Las personas con condiciones preexistentes como el asma, bronquitis crónica o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) pueden experimentar un empeoramiento de sus síntomas cuando se exponen a niveles altos de SO2.
• Daño Pulmonar: La exposición prolongada a concentraciones muy altas de SO2 puede causar daño a los pulmones, lo que puede llevar a problemas respiratorios crónicos y afecciones pulmonares más graves.
• Efectos Cardiovasculares: Algunos estudios sugieren que la exposición a concentraciones elevadas de SO2 puede estar asociada con un mayor riesgo de problemas cardiovasculares, como ataques al corazón y problemas en el sistema circulatorio.
• Irritación Ocular y de la Piel: El SO2 puede causar irritación en los ojos, resultando en enrojecimiento, lagrimeo y sensación de ardor. También puede causar irritación en la piel, especialmente en áreas expuestas.
• Efectos Sistémicos: En casos de exposición extrema, el SO2 puede ser absorbido por el torrente sanguíneo y afectar órganos y sistemas distantes del tracto respiratorio. Esto puede incluir efectos en el sistema nervioso central y otros sistemas del cuerpo.
• Efectos a Largo Plazo: La exposición crónica al SO2 puede tener efectos negativos a largo plazo en la salud, incluyendo el desarrollo de enfermedades respiratorias crónicas y agravamiento de condiciones preexistentes.

Es importante tener en cuenta que la sensibilidad a los efectos del SO2 puede variar entre individuos y depende de factores como la edad, la salud general y la duración y concentración de la exposición.

CLAVES PARA DETECCIÓN Y MEDICIÓN DE SO2

Algunas de las consideraciones más importantes dentro de la detección y medición de SO2 en espacios confinados son las siguientes:

1º Debemos tener más que claro que la única forma eficaz de detectar es gas es el uso de sistemas de detección de gases, para lo cual podemos utilizar detectores portátiles de gases. Como hemos visto ninguno de nuestros sentidos vale para detectar o percibir el monóxido de carbono.

Detector monogás de SO2	Detector multigás con bomba con sensor para SO2

2º Es esencial recordar que el tiempo de respuesta de los sensores electroquímicos para detección SO2, lo que en el manual del fabricante se llama T90 (tiempo que tarda el sensor en alcanzar el 90% de la concentración real), es relativamente alto y ronda los 30 segundos dependiendo de marca/modelo. Esto implica que meter el equipo en el espacio confinado y sacarlo a los 5 seg es igual a no haber medido.

3º Debemos asegurarnos de que se haya realizado correctamente la calibración del detector de gases siguiendo escrupulosamente lo indicado por el fabricante en el manual de instrucciones. La mayoría de los fabricante indica un periodo MÍNIMO de calibración cada 180 días o 6 meses.

4º La densidad relativa del SO2 con respecto al aire es de 2,25, lo que me indica que a misma presión y temperatura, en caso de presencia del SO2 en un espacio confinado, este tenderá a estratificarse en las capas inferiores donde tendré que tener especial atención a la hora de realizar el muestreo.